El Reiki es una técnica japonesa nacida a principios del siglo XX por el Sensei Mikao Usui. Rei significa consciencia cósmica, el todo; y Ki significa energía vital. Ésta técnica es reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y lo que hace es un trabajo energético: re-equilibra el cuerpo para que pueda sanar por sí solo.

Ésta técnica se utiliza para reforzar el cuerpo a diferentes niveles: físico, emocional y energético en cualquier tipo de proceso emocional o de enfermedad. Se trabaja la angustia, el estrés, la depresión y otros desequilibrios emocionales; a su vez, también sirve para acompañar la medicina tradicional en procesos de graves enfermedades. El Reiki se combina con otros tratamientos medicinales como la homeopatía, las flores de Bach, la medicina china, etc.

El re-equilibrio energético mediante el Reiki ha demostrado grandes resultados en distintos casos y tratamientos, lo que ha comportado que en la actualidad ésta sea una técnica reconocida y aceptada.

El Reiki se puede recibir de un terapeuta en sesiones; que pueden ser una o más de una. Sin embargo, también se puede recibir formación y aprender la técnica.

El terapeuta coloca sus manos en diferentes partes del cuerpo del paciente, principalmente en el canal enérgico central (los siete chacras primarios a lo largo de la columna vertebral y la cabeza) y en las articulaciones (chacras secundarios); también en aquellas zonas especialmente bloqueadas, contracturadas, doloridas o debilitadas. El paciente descansa de forma relajada, vestido y estirado en la camilla.

Las sesiones tienen una durada de mas o menos una hora. En función del trabajo que se deba llevar a cabo, el terapeuta puede proponer una sola sesión o más de una. Ésta decisión se toma de común acuerdo con el paciente.

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Ésta técnica se puede enseñar, ya sea para que la persona se haga Reiki a sí misma o para convertirse en maestro. La formación en Reiki es un camino personal y espiritual, con lo cual, su objetivo no es llegar a un punto en concreto, se trata de sentir el viaje y dejarse llevar por las manos y la energía. El aprendizaje se diferencia por tres niveles o grados y una maestría. La iniciación recibe el nombre japonés Reiju. En cada grado la persona experimenta distintos puntos de vibración energética, por este motivo, no necesariamente todas las personas deben hacer todos los niveles. Cada grado es un estadio diferente de vibración y espiritualidad, incomparables. Cada persona que experimenta el Reiki siente en qué punto del viaje interior está cómodo.

1. Primer nivel: Introducción al Reiki. Trabajo con uno mismo.

En este grado se aprende la técnica de sanación o equilibrio energético. El aprendiz hace el proceso de conocer sus manos, entra en contacto con el calor y siente que el Reiki le acompaña. Se contempla el Reiki en su globalidad y se realiza una mirada hacia adentro. Al finalizar el curso, la persona puede hacerse Reiki a sí misma y también puede aplicarlo al resto. Se tratan desequilibrios energéticos y dolencias.

El curso tiene una durada de 8 horas.

2. Segundo nivel: Se introducen los símbolos y se profundiza en la práctica.

En este segundo grado hay un proceso de profundización muy grande. Se entra en estados de relajación más profundos y la herramienta del Reiki adquiere más intensidad. El aprendiz entra en contacto con uno mismo a un nivel espiritual más intenso. Se aprende el símbolo del poder, el símbolo mental-emocional y el de la distancia. Este es un grado de acción, que permite diferenciar niveles de vibración; aporta más luminosidad y profundidad. Las prácticas del primer y el segundo nivel están guiadas.

El curso tiene una durada de 8 horas.

3. Tercer nivel: Símbolos del Reiki y como aplicarlo.

El tercer grado es el nivel del Maestro, el aprendiz se convierte en su propio guía. Hay quien imparte éste nivel junto con la Maestría, pero no es mi caso. El tercer curso es el más profundo de todos, el que nos conecta directamente con nuestra alma y en el que se aprenden las técnicas energéticas. Incrementa el trabajo personal y la vibración. El aprendiz se cuestiona lo aprendido y se convierte en su propio maestro.

El curso tiene una durada de 12 horas.

4. Maestría: Aprender a hacer iniciaciones de Reiki (Reijus)

En este punto se produce el compromiso con la divulgación y el aprendizaje constante. El aprendiz ya no necesita guía, sino que lo es.

Este curso se lleva a cabo en dos días y son un total de 12 horas. Después del curso hay un seguimiento de una vez al mes durante los primeros seis meses, puede ser online o presencial.

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